CCH Naucalpan denuncia a un comercio por grabar a estudiantes con fines pornográficos

CCH Naucalpan denuncia a un comercio por grabar a estudiantes con fines pornográficos

La administración del CCH Naucalpan brindó acompañamiento jurídico a los afectados y afectadas, así como a sus familiares. El levantamiento de actas aun continúa en proceso.

Este viernes, un grupo de alumnos del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) de Naucalpan, protestaron frente a una tienda de abarrotes, que se encuentra en las inmediaciones del plantel. El reclamo se debió a que descubrieron que uno de los encargados realizaba grabaciones sin consentimiento de los clientes que ingresaban al baño del negocio.

El grupo de estudiantes protestó tras encontrar un celular oculto en las instalaciones sanitarias del negocio, con el que los dependientes habían realizado decenas de grabaciones de clientes, entre ellos estudiantes y menores de edad. Los videos mostraban partes íntimas de las víctimas, sin su consentimiento.

Como señal de protesta, los estudiantes colocaron en el establecimiento varios carteles con denuncias. Debido a la indignación que causó esta denuncia, algunos de los manifestantes realizaron destrozos en el establecimiento. Los universitarios presumen que se trató de una práctica de pornografía infantil.

Por la mañana, la Dirección del CCH emitió un comunicado en el que informó que la universidad reportó los hechos a la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) de Naucalpan, y levantó una denuncia con número de folio 0278229/22/03 ante la Fiscalía de Justicia Del Estado de México, por la captación de imágenes sin consentimiento de estudiantes del plantel.

La administración del CCH Naucalpan brindó acompañamiento jurídico a los afectados y afectadas, así como a sus familiares. El levantamiento de actas aun continúa en proceso.

GRABARON MENORES DE EDAD CON UN CELULAR

Uno de los testimonios que han sido compartidos en las redes sociales refiere que dos estudiantes pidieron acceso al baño del establecimiento, el día 30 de marzo. Uno de los encargados les advirtió que si vomitaban el lugar, les cobraría una cuota adicional. Después observaron que otro de los dependientes ingresó al baño luego de que una de las universitarias lo desocupó.

Las estudiantes pensaron que iba a corroborar que no habían vomitado. Sin embargo, cuando ingresó la siguiente clienta, encontró un celular oculto que tenía activada la cámara, y había realizado grabaciones de su compañera. Al revisar el dispositivo, encontró decenas de grabaciones similares, entre ellas, imágenes de menores de edad. El administrador del negocio le arrebató el teléfono y huyó del lugar.