La economía estadounidense aun se encuentra en un periodo resiliente posterior a la pandemia, y enfrenta duras reacciones debido a la guerra en Ucrania y rebrotes de COVID en China.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos reportó que la inflación en ese país alcanzó un máximo histórico al posicionarse en 6.6 por ciento en 12 meses a marzo, y los precios se incrementaron .9 por ciento entre febrero y el mes pasado. Debido al panorama económico adverso, la Reserva Federal (Fed) contempla ajustar de nueva en cuenta las tasas de interés. El movimiento está contemplado para la próxima semana.
De manera preliminar, el Departamento de Comercio estadounidense estimó que durante el primer quatrimestre de este año, el producto interno bruto (PIB) real de EU se contraerá a una tasa anual del 1.4 por ciento. El análisis completo de este indicador, será publicado a finales de mayo.
La dependencia estadounidense contempló que la disminución del PIB real ha generado afectaciones en la inversión en inventarios privados, las exportaciones, el gasto del Gobierno federal y el gasto de los gobiernos estatales y locales, los cuales decrecieron durante este primer trienio.En tanto que han aumentado los gastos en el consumo personal (PCE, por sus siglas en inglés), la inversión fija no residencial y la inversión fija residencial.