México ha impuesto varias medidas a Estados Unidos para impedir la importación de maíz transgénico al sostener que su empleo puede afectar a la diversidad de variedades nativas de maíz. La respuesta del Gobierno estadounidense ha sido presionar desde el marco del TMEC y rechazar el sustento científico en la argumentación de México.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos ha rechazado participar en investigaciones en conjunto con México para determinar los impactos en la salud por el consumo de maíz modificado con ingeniería genética, conocido como maíz transgénico.
Víctor Suárez Carrera, subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), reveló a Reuters que México ha propuesto llevar a cabo investigaciones conjuntas en la materia, pero sus contrapartes estadounidenses se han negado a colaborar, al argumentar que no existe base científica para considerar posibles daños a la salud por el consumo de maíz transgénico.
México ha abordado el tema en varias reuniones, entre ellas durante la visita del secretario de Agricultura estadounidense, Tom Vilsack, y en otros eventos realizados en Washington. Sin embargo, los funcionarios de EU se han negado, advirtió el funcionario a la agencia internacional.
«[Los funcionarios estadounidenses ] no quisieron poner un periodo en que las dos partes se pusieran de acuerdo para hacer estudios de impacto [del maíz transgénico] a la salud animal y a la salud humana.
«Ellos deciden qué necesitamos producir en México y qué necesitamos comer en México; eso es soberbia», indicó Suárez a Reuters.
A solicitud de Reuters el Departamento de Agricultura de EU respondió que «discrepa fundamentalmente» de la postura que ha adoptado México en relación a temas de biotecnología, en particular respecto al maíz modificado, y advirtieron que la postura prohibicionista de México puede afectar a los agricultores estadounidenses.
La dependencia que dirige Vilsack ha expresado su rechazo a la postura de México de prohibir el maíz transgénico en la elaboración de la tortillas y en su empleo como alimento en el sector ganadero, al considerar que su distribución en México puede afectar a las especies de maíz nativas. El Departamento de Agricultura considera que este argumento carece de argumentación científica.
México cuenta con al menos 59 razas nativas de máíz, lo que representa el 20 por ciento del total de razas registradas en América. Sin embargo, una investigación realizada por el Gobierno federal en el 2016, llamado “Huella genética de maíz”, estimó que el número de razas de maíz que alberga el país podría llegar a 62.
A principios de junio iniciaron una serie de consultas binacionales a las que más tarde se sumó Canadá con el fin de revisar las controversias surgidas en torno al maíz transgénico, en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC). Si en un plazo de 75 días no se resuelven las discrepancias, EU podrá convocar a un panel para llegar a una solución. Suárez indicó a Reuters que México está listo para enfrentar este escenario.
«Si ellos establecen el panel, nosotros nos defenderemos, y si nos defendemos es que pensamos que vamos a ganar», sostuvo Suárez y agregó que la política en México no tiene impacto en la dinámica comercial estadounidense.
LA NOM-187 Y OTRAS RESTRICCIONES
El gobierno encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador ha emprendido una serie de acciones para inhibir el consumo de maíz transgénico en la elaboración de tortillas. En febrero, AMLO firmó un nuevo decreto para revocar permisos y frenar las autorizaciones de liberación de semillas de maíz genéticamente modificado para alimentación humana.
Durante junio, AMLO anunció que impondría aranceles en la importación de maíz blanco y que firmaría un acuerdo con tortillerías del país para que no empleen maíz transgénico en la elaboración de tortillas.
«Estoy por firmar esta semana [un acuerdo] para que en las tortillerías solo se use maíz blanco y no transgénico. Esto va a ir acompañado del establecimiento de aranceles para que no se importe y se compre a los productores mexicanos”, afirmó el presidente.
A estas medidas se suma la próxima publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF) de una actualización a la NOM-187, en cuyo anteproyecto se prohíbe el uso de maíz transgénico en la elaboración de tortillas.
