Embajada de Rusia niega que el Kremlin financie una red desinformación denunciada por el Departamento de Estado

Embajada de Rusia niega que el Kremlin financie una red desinformación denunciada por el Departamento de Estado

El Departamento de Estado citó un informe realizado por el Instituto de la Paz (USIP) para advertir que el Kremlin financia una red de desinformación para mermar el apoyo a Ucrania y promover ideas en contra del neocolonialismo estadounidense en América Latina. Sin embargo, la Embajada de Rusia aseguró que el informe no aportó pruebas y revirtió las acusaciones. 

La Embajada de Rusia en México negó intentar promover una agenda de desinformación en América Latina como alertó el Departamento de Estado de los Estados Unidos. La versión estadounidense apunta a que el Kremlin estaría financiando una red de manipulación en América Latina para disuadir el apoyo a Ucrania en el contexto de la guerra que enfrenta con Rusia.

Sin embargo, la representación de Rusia respondió que son los estadounidenses quienes «intentan manipular la opinión pública y distraer de los problemas reales» de la región.

El Departamento de Estado emitió una nota para medios este martes [7.11.23] en la que alertó que el Gobierno ruso financiaría una campaña en América Latina para manipular el entorno informativo de medios de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Cuba, México, Venezuela, Brasil, Ecuador, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay.

El objetivo de la campaña sería socavar el apoyo a Ucrania, en el marco del conflicto armado que enfrenta el país exsoviético con Rusia y fomentar sentimientos antiestadounidenses y en contra de la  Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

El Departamento de Estado fundamentó sus acusaciones en una investigación realizada por el Instituto de la Paz de EU (USIP, por sus siglas en inglés), que reportó en el informe «Campañas de influencia rusa en América Latina» rastros de actividad de redes de desinformación que operarían desde inicios del Gobierno del presidente ruso Vladimir Putin en el año 2000, y se habrían intensificado durante los años 2014 y 2022, en que escaló el conflicto en Ucrania.

El Departamento de Estado explicó que una de estas campañas habría sido coordinada desde el La Agencia de Diseño Social (SDA), el Instituto para el Desarrollo de Internet y Structura con el objetivo de promover intereses del Gobierno ruso y cooptar a los gobiernos locales. Para esta tarea, colaboran con medios de comunicación e influencers para difundir presunta desinformación y propaganda.

Estos colaboradores habrían contado con capacidad técnica y experiencia en entornos informativos, así como historial en la difusión de desinformación y propaganda prorrusa.

En el informe se señalaron a varios empresarios que estarían involucrados en una red de propaganda desinformativa: Ilya Gambashidze, director de SDA, quien sería el coordinador de actores de influencia maligna; Andrey Perla, director de SDA y Nikolay Tupikin director de Structura; también estaría involucrado el periodista Oleg Yasinsky.

El Departamento de Estado describió una mecánica que seguiría este equipo para cumplir con su objetivo, el cual iniciaría con la conformación de un grupo de periodistas y líderes de opinión pública, posiblemente situado en Chile. Otro equipo sería el responsable de crear el contenido desde Rusia y enviarlo a América Latina, donde sería editado añadiendo elementos locales y después sería publicado.

La agencia estadounidense señaló a dos medios como parte de la operación: El Ciudadano y Pressenza. Los temas con los que trabajaría este equipo serían elegidos en conjunto con el Gobierno ruso y estarían enfocados en promover que la guerra con Ucrania es justa y que América Latina puede unirse a Rusia para derrotar al neocolonialismo.

Asimismo, el Departamento de Estado acusó a las embajadas de Rusia distribuidas en América Latina de amplificar los mensajes del Kremlin.

«Hay esfuerzos coordinados entre las embajadas rusas en América Latina y los medios de comunicación financiados por el estado para aumentar los mensajes pro-Kremlin, difundir narrativas anti-Estados Unidos y desarrollar asociaciones entre los medios estatales rusos, los medios de comunicación locales y las estaciones de radio, percibidos como terceros pro-Moscú. embajadas de países en la región y periodistas locales», señaló la agencia. 

EMBAJADA RUSA RESPONDE

La Embajada de Rusia en México respondió que el informe estadounidense no proporcionó pruebas de los señalamientos y revirtió las acusaciones al afirmar que es Estados Unidos quien recurre a la desinformación, la manipulación, el chantaje y otras prácticas para promover su política exterior a través de una agenda que pretende «resucitar su proclamada ‘Doctrina Monroe‘ soñando con convertir al mundo entero «en su patio trasero».

La Embajada rusa aseguró que no impone a «sus amigos de América Latina» una elección de qué lado tomar, sino que abogan por una cooperación equitativa y mutuamente beneficiosa.

«En su informe, Estados Unidos intenta una vez más acusar infundadamente a Rusia de todos los pecados mortales. Como siempre, se sacan conclusiones sin ninguna prueba. Cabe señalar que métodos como la desinformación, la manipulación de la opinión pública, el chantaje, los juegos políticos y la injerencia en los asuntos internos de otros países han sido durante mucho tiempo un sello distintivo de la política exterior de Estados Unidos», sostuvo la Embajada rusa.