Las personas de 57 años o más enfrentan dificultades para adaptarse al uso de Internet, redes sociales y servicios de mensajería. Son el grupo de población que ha tardado más tiempo en migrar a la era digita y el que más asistencia busca en sus familiares. Sin embargo, no siempre la obtiene.
Los adultos de 57 años o más es el grupo de población más afectado por la brecha digital y enfrentan dificultades para utilizar servicios de telecomunicaciones e Internet.
En la «Segunda Encuesta de Usuarios de Servicios de Telecomunicaciones» del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), las respuestas arrojaron que los adultos mayores de 57 años son lo que más ayuda de otras personas requieren para utilizar smartphones, servicios de mensajería y redes sociales y los que menos la reciben; también son el grupo de población más cómodo con el uso de la telefonía fija y computadoras de escritorio.
Se trata de las generaciones que nacieron durante la primera mitad del siglo XX y hasta 1966, quienes vieron evolucionar las primeras generaciones de la computación y el apogeo de la televisión, la radio y la telefonía fija. Grupos de población que atestiguaron el inicio de un desarrollo tecnológico intensivo, desde la irrupción de la televisión a color y la introducción de la radio FM, las microondas, la fibra óptica, etc. Sin embargo, la irrupción de la era digital implicó un cambio demasiado drástico y poco familiar para muchos que se habían habituado a las tecnologías análogas.
De acuerdo con el estudio, el 30.3 por ciento de los adultos de 57 años o más necesitan ayuda para publicar, ver contenido y mensajear a través de las redes sociodigitales; el 33.1 por ciento requiere ayuda para utilizar Whatsapp, Telegram y servicios similares de comunicación y el 24.8 por ciento necesita asistencia para utilizar servicios de televisión por streaming o YouTube.
El 31 por ciento de las personas mayores de 57 años han solicitado ayuda para utilizar un smartphone. Este es el grupo de población que más ha necesitado de apoyo para el uso de estos dispositivos electrónicos. La encuesta del organismo público descentralizado también reveló que este grupo de población ha necesitado ayuda principalmente en el uso e instalación de aplicaciones.
A pesar de la brecha digital, el grupo de 57 años o más es el que menos se ha capacitado para mejorar sus habilidades digitales. Durante el último año, solo 12.4 por ciento de este grupo dijo haber buscado mejorar sus conocimientos en el área. En tanto que solo el 20.2 por ciento buscó capacitación para aprender a utilizar el teléfono móvil.
En cuanto a la manera de informarse sobre estos temas, el grupo de población quincuagenario fue el que mayor interés tuvo por ser capacitados por sus familiares, con un 22 por ciento de personas encuestadas que dijeron preferir esta vía. Aunque también dijeron estar interesados por la capacitación a través de cursos en línea.
El 16 por ciento de las personas mayores de 57 años que no utilizan Internet, dijeron que no acceden a esta tecnología porque no saben utilizarla, este es el grupo de población con mayor incidencia en esta respuesta. Lo mismo ocurrió en el caso del uso del smartphone donde el 15.5 por ciento dio la misma respuesta.
En cuanto a la actualización de la tecnología que utilizan, el grupo señalado también representó el mayor porcentaje en la encuesta de casos en los que su teléfono móvil no tienen acceso a Internet o redes sociales. De acuerdo con el resultado del informe, el 31.8 por ciento de estos usuarios padecen esta deficiencia, que incluso les impide acceder a servicios públicos y vías de comunicación con gobiernos y representantes populares.