La transferencia del mando de la Guardia Nacional al Ejército no se detendrá con el cambio de Gobierno

La transferencia del mando de la Guardia Nacional al Ejército no se detendrá con el cambio de Gobierno

El presidente Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum Pardo mantienen su determinación en transferir el mando de la Guardia Nacional al Ejército. El primer mandatario teme que de no hacerse las Fuerzas Armadas se corrompan; mientras que la presidenta virtual sostuvo que este proceso no implica una militarización.

El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró que continuará la transferencia del mando de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) luego que la presidenta virtual Claudia Sheinbaum Pardo indicó que a partir del 1 de octubre lo relevará en el impulso de la reforma que formalizará el proceso.

El primer mandatario teme que si la Guardia Nacional no se integra a la Sedena, podría corromperse como sucedió con la extinta Policía Federal, fundada en 2009, durante el sexenio del expresidente Felipe Calderón para cumplimentar parte de la estrategia de la Guerra contra el crimen organizado.

“Si esa institución se deja, como pasó con la Policía Federal en Gobernación en la Secretaría de Seguridad Pública, se va a echar a perder. Si depende de una Secretaría como la Defensa, que tiene una tradición de formación a sus elementos, tiene colegios, hay doctrina, profesionalismo, disciplina, hay garantía de que no se corrompa la Guardia Nacional”, indicó el primer mandatario.

Claudia Sheinbaum abordó el tema durante un evento en Oaxaca, donde adelantó sus planes de continuar con la consolidación del mando militar de la Guardia Nacional. Este lunes, la presidenta electa aclaró que el proceso no implica necesariamente una militarización de las Fuerzas Armadas, ya que el Ejército no asumirá el control de la política de seguridad.

“Todos aquellos que dicen que es militarización, no es militarización. Militarización sería si quien dictara la política de seguridad fuera una institución solamente, el ejército. Y no es así, la política de seguridad la define el gobierno de la República”, señaló Sheinbaum.

La presidenta electa consideró que las condiciones de inseguridad del país no es posible retirar al Ejército de las calles. “Hay lugares en el país donde, si uno en este momento sacara al Ejército, quedarían desamparados», dijo.