Polonia tema conflicto a gran escala tras despliegue de tropas chinas en Bielorrusia

Polonia tema conflicto a gran escala tras despliegue de tropas chinas en Bielorrusia

Polonia activó las alertas sobre el avance militar de Bielorrusia y China, luego de que miles de soldados chinos fueron desplegados a escasos kilómetros de la frontera que podría ser cerrada. La presencia de militares polacos se incrementó en la región limítrofe, mientras que en conjunto con Estonia, Letonia y Lituania, han solicitado a la Unión Europea mayor inversión en seguridad. 

El Gobierno de Polonia advirtió que podría cerrar su frontera ante la ejecución de maniobras militares en Bielorrusia por parte de las Fuerzas Armadas de China. Una de las declaraciones de mayor severidad ha sido la del jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Polonia, Wieslaw Kukula, quien señaló que el país debe prepararse “para un conflicto a gran escala, no un conflicto de tipo asimétrico”.

El 10 de julio, el Gobierno polaco restringió por tiempo indefinido el ingreso de vehículos de carga pesada procedentes de Bioelorrusia. La medida fue implementada sin previo aviso y ocasionó una importante aglomeración en la frontera.

Bielorrusia teme que en los próximos días también se bloquee el tránsito de trenes luego de que Polonia impuso medidas estrictas de inspección como «una demostración de poder», según declaró el ministro de Exteriores, Radoslaw Sikorski, citado por Swissinfo.

La medida causaría el estrangulamiento del ingreso de mercancías chinas, debido a que Polonia es un paso obligatorio para la mayoría de los trenes procedentes de China, cuyas exportaciones se verían afectadas.

El ingreso a Polonia para ciudadanos de Bielorrusia solo se encuentra habilitado en Terespol-Brest, y las largas filas han ocasionado que el trámite se prolongue hasta por 35 horas.

Desde 2020, Polonia acusa a Bielorrusia de estar detrás de una oleada de migración ilegal con el presunto objetivo de generar desestabilización.

En respuesta a la migración bielorrusa, Polonia construyó un muro fronterizo de 400 km de extensión y militarizó la zona con 6 mil soldados y miles de policías.

Las tensiones aumentaron a principios de julio, cuando inició en Bielorrusia la operación militar «Ataque de las Águilas 2024» en la que participa el Ejército de China. Como parte de este operativo, miles de soldados chinos fueron desplegados en la zona fronteriza a escasos kilómetros de Polonia.

La presencia de los soldados chinos ha activado las alarmas de Polonia y se extendieron a Estonia, Letonia y Lituania, quienes solicitaron a la Unión Europea que se apliquen medidas extraordinarias para reforzar la seguridad en la zona limítrofe con Bielorrusia.

Polonia incrementó el número de soldados que tiene desplegados en la frontera, de 6 mil a 8 mil y espera aumentar a 9 mil para agosto.

ARMAS ILEGALES Y POTENCIALMENTE DESTRUCTIVAS

A principios de julio, Lituania anunció que contemplaba abandonar la Convención sobre Municiones en Racimo (CMR) con el propósito de almacenarlas y permitir su traslado en el país.

La CMR es un acuerdo mundial que data del 2010 mediante el que se prohíbe el empleo de estas armas, así como su producción, transferencia y almacenamiento. Los países firmantes también se comprometen a destruir las reservas existentes en un plazo de 8 años y limpiar la contaminación que causaron en 10 años.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las municiones en racimo están prohíbidas porque «tienen efectos de área amplia y no pueden distinguir entre civiles y combatientes». Además, dejan municiones sin detonar que pueden asesinar y herir a civiles.

El borrador de la iniciativa lituana fue presentado por el ministro de Defensa, Laurynas Kasciunas y aprobado por el Consejo de Ministros. Durante una visita a la frontera con Bielorrusia, el funcionario indicó que Lituania tiene contemplado invertir 600 millones de euros en medidas de protección en sus fronteras con Bielorrusia y Rusia.

La iniciativa ha resultado polémica debido al nivel de destrucción que tienen las armas en racimo. Este martes, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México se posicionó sobre el tema. A través de un comunicado, el Gobierno mexicano externó su preocupación por la iniciativa Lituana.