Aunque hubo algunas mejoras en materia de empleo, el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador concluirá con un mercado laboral moderado que no logró revertir el estancamiento en creación de empleos de 2019 y que al concluir agosto, da indicios de que el país podría estar en la antesala de una recesión.
En octubre concluye el mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador con claroscuros en materia de empleo. Uno de los avances laborales fue el aumento histórico del salario mínimo, que aumentó en un 110 por ciento entre el 2018 y el 2024. Sin embargo, el empleo formal se estancó y especialistas estiman que sus cifras moderadas anticipan una posible recesión en México.
Este jueves, fueron publicados los empleos registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) correspondientes al mes de agosto. De acuerdo con este reporte, en el octavo mes se crearon 58 mil 47 nuevos empleos, la cifra más baja registrada desde el 2019, en que se reportaron 36 mil 631 empleos, omitiendo las cifras negativas de la crisis del 2020 debido a la pandemia.
La economista Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Grupo Financiero BASE, indicó que entre enero y agosto de este año se crearon 41 por ciento menos empleos que en el mismo periodo del 2023, esto corresponde a 365 mil 449 empleos. Siller explicó que las cifras de los primeros 8 meses del año se acercan a las obtenidas durante el 2019, año en el que se reportó la creación de 342 mil 645 empleos, una cantidad menor a la esperada debido a que en ese año el país entró en recesión. Por lo que existe la posibilidad de que durante 2024, México vuelva a presentar este problema.
«Cabe recordar que en el 2019 la economía mexicana se encontraba en una recesión, por lo que la baja creación de empleo este año es señal de una marcada desaceleración y de una alta probabilidad de que la economía mexicana, si sigue con la misma tendencia, podría caer en recesión», indicó la economista.
El sexenio de López Obrador atravesó por una pandemia global que conllevó a una aceleración inflacionaria que afectó los mercados de todo el mundo. Pero también tuvo que hacer frente al estancamiento económico en América Latina, que ha afectado a la región durante los últimos 10 años, de acuerdo con datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
En el «Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2024», la comisión de las Naciones Unidas (ONU) atribuyó la desaceleración económica que presentó México en 2023, a un «menor impulso del valor de las exportaciones hacia los Estados Unidos». Sin embargo, el desempleo comenzaba a retroceder en ese año.
Para el 2024, el empleo no logró continuar con la tendencia del año anterior. La población desocupada tuvo una ligera disminución en el segundo trimestre de este año con relación al año anterior, de sólo 0.1 por ciento, con una tasa trimestral de 2.7 por ciento. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), durante este periodo, la generación de empleos se concentró en el sector de construcción, el cual tuvo un auge económico importante este año debido a los megaproyectos de infraestructura impulsados por el Gobierno federal. Sin el incremento de la demanda laboral de trabajadores de la construcción, el crecimiento del empleo hubiera sido menor. Lo que indica que existen sectores en donde ya se está presentando estancamiento.
De acuerdo con la Cepal, en toda América Latina la desaceleración económica de la última década ha contribuido a la falta de nuevos empleos, tanto a nivel agregado como sectorial. La escasa creación de empleos afectó a todos los sectores y ocasionó un cambio en la distribución. Mientras que la oferta laboral existente se ha concentrado en sectores con menor crecimiento productivo, como es el caso de los servicios y la construcción.
La meta de alcanzar una inflación de 3 por ciento ha sido prolongada por los expertos consultados por el Banco de México (Banxico) en la Encuesta sobre Expectativas, con corte al mes de agosto, en la que se estima que México concluirá el año con una inflación general de 4.69 por ciento.
En la minuta publicada en el mismo mes, la Junta de Gobierno estimó que el consumo en los Estados Unidos podría verse reducido debida el enfriamiento laboral en ese país, donde se han registrado reducciones en la creación de empleos. Esto ha ocasionado volatilidad en los mercados.
Banxico concluyó que en México, el mercado laboral también mostró indicios de moderación, aunque se mantiene con fortaleza. Algunos miembros de la Junta consideraron que la población ocupada ha mostrado una disminución y la desocupada se ha incrementado. Uno de ellos señaló que la participación laboral al corte de junio cayó por debajo del 60 por ciento por primera vez en los últimos 12 meses.
