Tras la muerte del cantante Liam Payne, exintegrante de One Direction sus amigos revelaron a la prensa británica que semanas previas a la tragedia habían estado profundamente preocupados por su comportamiento errático y su creciente consumo de alcohol y drogas.
Un amigo cercano de Liam habló en exclusiva con The Sun, y reveló que el día de su muerte intentaron sugerirle que buscara ayuda profesional, pero esta recomendación pareció exacerbar aún más su estado. «El día de su muerte se comportaba de forma muy extraña y errática. Uno de sus amigos le volvió a sugerir que buscara ayuda, pero esto pareció empeorarle aún más», declaró la fuente.
La escena en la habitación de hotel de Payne fue desoladora. En el lugar, las autoridades encontraron champán, medicamentos recetados, polvo blanco y envoltorios de aluminio, así como muebles destruidos. Otros huéspedes del hotel afirmaron que Payne había estado comportándose de manera «perturbadora» en las horas previas a su caída, con uno de ellos recordando que Liam le comentó: «Solía estar en una banda de chicos, por eso estoy tan jodido».
Amigos cercanos del artista habían notado un deterioro en su estado emocional en las últimas semanas. La misma fuente indicó: «Sus amigos han estado preocupados por él durante semanas porque estaba teniendo problemas con su carrera y quería lanzar algo de música nueva, pero sentía que no era tan bueno como sus otros compañeros de banda. Siempre era muy duro consigo mismo».
Según The Sun, el círculo cercano de Payne ya había comenzado a planear una intervención para ayudarlo a superar su consumo de alcohol y drogas. «En las últimas semanas, su consumo de alcohol y su supuesto consumo de drogas comenzaron a preocupar a sus amigos. Estaban planeando una intervención; la situación era tan grave», añadió el amigo entrevistado.
Liam se encontraba en Buenos Aires para acompañar a su excompañero de banda, Niall Horan, en su gira. Aunque su novia, Kate Cassidy, de 25 años, lo había acompañado en el viaje, se había marchado dos días antes de la tragedia. La policía de Buenos Aires confirmó que Payne falleció al instante debido a las graves heridas sufridas en el cráneo tras la caída. Los resultados de un informe toxicológico están pendientes. Payne deja un hijo de siete años, Bear, fruto de su relación con la cantante Cheryl Cole.