A solo cuatro días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, programadas para el 5 de noviembre, una encuesta del think tank Data for Progress ha revelado las tendencias actuales en cuatro estados clave: Pennsylvania, Georgia, Arizona y Nevada. Estos estados son considerados cruciales para el resultado de la contienda entre la actual vicepresidenta Kamala Harris, del Partido Demócrata, y el expresidente Donald Trump, del Partido Republicano.
Los datos recopilados entre el 25 y el 31 de octubre indican que la contienda se mantiene cerrada entre ambos candidatos. Harris se encuentra al frente en Pennsylvania, Georgia y Nevada, mientras que Trump lidera en Arizona. En Pennsylvania, Harris obtiene el 50% de las preferencias, frente al 48% de Trump, lo que representa una ventaja de dos puntos. En Georgia, la diferencia es mínima, con Harris al 49% y Trump al 48%. Nevada presenta una situación similar, con Harris en 49% y Trump en 47%. En contraste, en Arizona, Trump lleva la delantera con un 48% frente al 47% de Harris.
Además, el informe señala que la valoración neta de Harris es más alta que la de Trump en Pennsylvania, Georgia y Nevada, mientras que ambos candidatos están empatados en Arizona.
Carrera por el Senado
En cuanto a la carrera por el control del Senado de EU, los demócratas también lideran en las elecciones de tres de los estados encuestados. En Pennsylvania, el senador demócrata Bob Casey aventaja al republicano Dave McCormick por 4 puntos, obteniendo un 49% de apoyo frente al 45% del candidato opositor. En Arizona, el representante demócrata Ruben Gallego supera a la republicana Kari Lake por 5 puntos, con un 50% frente al 45%. Por su parte, en Nevada, la senadora demócrata Jacky Rosen tiene una ventaja de 7 puntos sobre el republicano Sam Brown, con un 49% contra el 42%.
Medidas en la boleta electoral
Además de las elecciones presidenciales y senatorial, se espera que las medidas en las boletas de Arizona y Nevada que consagran el derecho al aborto en las constituciones estatales cuenten con un fuerte apoyo mayoritario.
Con el reloj avanzando hacia el día de la votación, las encuestas reflejan un panorama dinámico y competitivo que podría definir el futuro político de Estados Unidos en los próximos años. La atención de los votantes se centra no solo en las elecciones presidenciales, sino también en la carrera por el Senado, lo que añade un nivel adicional de importancia a la jornada electoral del 5 de noviembre.