El mercado laboral mexicano registró en 2024 su peor desempeño en términos de generación de empleo desde 2014, según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE). Con solo 174,656 nuevos puestos de trabajo, el país enfrenta desafíos en la recuperación del empleo formal y el crecimiento económico.
En 2024, la creación de empleos en México alcanzó su nivel más bajo en una década de acuerdo con El Economista, con solo 174,656 puestos de trabajo generados, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE). Esta cifra representa el ritmo más bajo de crecimiento del mercado laboral desde 2014, cuando solo se sumaron 109,495 personas a la población ocupada. Desde 2015, los nuevos puestos de trabajo superaban el medio millón anual, salvo en 2020, cuando se perdieron 3.1 millones de empleos debido a la pandemia de Covid-19.
Situación de la Población Económicamente Activa (PEA)
En diciembre de 2024, la población económicamente activa (PEA) alcanzó 60.8 millones de personas, 66,000 más que en el mismo mes de 2023. No obstante, la tasa de participación económica se redujo al 59.3%, por debajo del 59.9% del año anterior.
Este resultado refleja un freno en la generación de puestos de trabajo, que en años anteriores se mantuvo por encima del medio millón, salvo en 2020 cuando la pandemia provocó la pérdida de más de 3 millones de plazas.
A pesar del incremento en la población económicamente activa, que en diciembre de 2024 alcanzó los 60.8 millones de personas, el crecimiento del empleo no ha sido suficiente para absorber la demanda laboral. La tasa de participación económica, que mide a las personas que trabajan o buscan empleo, se redujo ligeramente respecto al año anterior, situándose en 59.3%.
El empleo femenino fue uno de los sectores más afectados. La participación económica de las mujeres cayó 0.3 puntos porcentuales, lo que evidencia las barreras estructurales que siguen limitando su incorporación al mercado laboral. En contraste, la ocupación masculina también registró una disminución, aunque en menor medida.
Uno de los aspectos más preocupantes del reporte es la persistencia de la informalidad laboral, que sigue afectando a más de la mitad de la población ocupada. En diciembre de 2024, 31.8 millones de trabajadores laboraban en condiciones informales, sin acceso a seguridad social ni prestaciones, lo que refleja un desafío para mejorar la calidad del empleo en el país.
Por sectores, los servicios, el comercio y la industria manufacturera continúan siendo las principales fuentes de empleo en México. Sin embargo, la precarización del trabajo, reflejada en la alta proporción de personas en condiciones críticas de ocupación, sugiere que el crecimiento económico no se traduce en una mejora sustancial en la calidad del empleo.
El panorama laboral mexicano en 2024 plantea interrogantes sobre la efectividad de las políticas económicas y laborales para generar empleo digno y sostenido. La baja creación de puestos de trabajo y la persistencia de la informalidad evidencian la necesidad de estrategias que impulsen una recuperación más equitativa y estable.
El mercado laboral mexicano mostró una desaceleración en la generación de empleos, con un ritmo de crecimiento inferior al de los últimos 10 años. Aunque la tasa de desocupación y la subocupación presentaron ligeras mejoras, la disminución en la participación económica y el estancamiento de la informalidad laboral reflejan los retos pendientes para el país en materia de empleo.