En un operativo interinstitucional realizado en Tonalá, Chiapas, la Fiscalía General del Estado desmanteló una red de cámaras de videovigilancia ilegales presuntamente instaladas por el crimen organizado para vigilar a la población. Se aseguraron un total de 26 cámaras en diferentes localidades, como parte de las acciones de la estrategia de seguridad Nueva ERA.
La Fiscalía General de Chiapas informó que, como parte de un operativo interinstitucional, se logró desmantelar una red de cámaras de videovigilancia presuntamente colocadas por miembros del crimen organizado para vigilar a la ciudadanía, de manera similar a un C5. El insólito hallazgo ocurrió en Tonalá, Chiapas, tras una operación conjunta entre diversas autoridades.
El operativo fue ejecutado bajo el marco de la estrategia de seguridad de la Nueva ERA, con la participación de la Fiscalía General del Estado, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Seguridad del Pueblo y la Policía Municipal de Tonalá. Las cámaras ilegales fueron encontradas instaladas en postes de CFE, Teléfonos de México y en el sistema de alumbrado público, y se procedió a su desactivación.
En total, se aseguraron 26 cámaras de videovigilancia ilegales: 11 en Paredón, 3 en Boca del Cielo, 2 en Cabeza de Toro y 10 en Puerto Arista y Playa del Sol. Los objetos asegurados fueron puestos a disposición del Fiscal del Ministerio Público para determinar las acciones legales correspondientes.
La Fiscalía General del Estado de Chiapas reiteró su compromiso con la seguridad y la paz en el estado, garantizando Cero Impunidad en estos casos.