La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ha emitido alertas sobre los riesgos asociados con el consumo de Ozempic y otros medicamentos derivados de semaglutida, especialmente aquellos comercializados ilegalmente o en versiones compuestas no aprobadas. Aunque estos productos, aprobados para tratar la diabetes tipo 2 y la obesidad, ofrecen beneficios en la regulación de los niveles de glucosa y la reducción de peso, la FDA ha identificado varios problemas relacionados con su uso, incluyendo la venta de versiones falsificadas y compuestas que no cumplen con los estándares de seguridad y eficacia.
Semaglutida
La semaglutida es un medicamento que pertenece a la clase de los agonistas del receptor GLP-1 (péptido-1 similar al glucagón). Este compuesto imita una hormona natural que regula el apetito y aumenta la producción de insulina, lo que resulta en una reducción de la glucosa en sangre. Además de su uso para controlar la diabetes tipo 2, la semaglutida ha sido aprobada para ayudar a la pérdida de peso en personas con obesidad o sobrepeso.
Actualmente, existen tres productos aprobados por la FDA que contienen semaglutida: Ozempic, para la diabetes; Wegovy, destinado a la pérdida de peso; y Rybelsus, en forma de tabletas. Todos estos medicamentos se suministran solo con receta médica.
El riesgo de los medicamentos compuestos y falsificados
Uno de los mayores riesgos que la FDA ha identificado es el uso de versiones de semaglutida compuestas, que son preparadas por farmacias sin la supervisión de la agencia reguladora. La FDA ha recibido informes de efectos adversos derivados de estos compuestos, que a menudo contienen formas salinas de semaglutida (como semaglutida sódica y acetato de semaglutida), las cuales no han sido evaluadas ni aprobadas por la agencia para su uso en humanos. Estos productos pueden carecer de la eficacia que se espera de la semaglutida original y, en algunos casos, pueden ser peligrosos para la salud.
Además, la FDA ha encontrado productos falsificados de Ozempic en el mercado, particularmente a través de plataformas en línea, lo que aumenta el riesgo de que los pacientes adquieran medicamentos adulterados, con efectos secundarios graves e impredecibles.
La comercialización ilegal en redes sociales
Recientemente, las autoridades estadounidenses anunciaron la apertura de una denuncia penal contra Isis Navarro Reyes, quien vendió medicamentos falsificados de Ozempic y otros productos para bajar de peso a través de redes sociales, como TikTok. Reyes, quien no tenía licencia para dispensar medicamentos, comercializó productos no aprobados por la FDA, poniendo en grave peligro la salud de sus seguidores. La distribución de estos medicamentos falsificados es un claro ejemplo de cómo los delincuentes intentan aprovechar la creciente demanda de semaglutida y otros fármacos para adelgazar, sin importar el riesgo que representa para los consumidores.
Efectos adversos
Con datos de más de dos millones de pacientes, un estudio halló que el riesgo de desarrollar artritis y pancreatitis era mayor entre los que siguen un tratamiento con estos medicamentos, basados en lo que se conoce como ‘agonistas del receptor del péptido (GLP-1)’. Publicado en la revista Nature, el artículo Mapeo de la eficacia y los riesgos de los agonistas del receptor de GLP-1 revela que Ozempic, Wegovy y otros compuestos de semaglutida se asociaron «con un riesgo reducido de uso de sustancias y trastornos psicóticos, convulsiones, trastornos neurocognitivos (incluida la enfermedad de Alzheimer y la demencia), trastornos de la coagulación, trastornos cardiometabólicos, enfermedades infecciosas y varias afecciones respiratorias».
No obstante, el estudio encontró que «estos medicamentos se asociaron con un aumento del 11% en el riesgo de artritis y un 146% más de riesgo de pancreatitis, una inflamación del páncreas que puede provocar complicaciones potencialmente mortales», según Nature. Frente a las ventajas también comprobadas de estos medicamentos, como el control del azúcar en sangre, la reducción de la obesidad y la ayuda con las enfermedades cardíacas y el párkinson, la advertencia de los autores, dirigidos por Yan Xie, investigador del Centro de Epidemiología Clínica del St. Louis Health Care System (Estados Unidos), viene del «mayor riesgo de trastornos gastrointestinales, hipotensión, síncope, trastornos artríticos, nefrolitiasis, nefritis intersticial y pancreatitis» inducidos por estos fármacos.
Recomendaciones para pacientes y profesionales de la salud
La FDA insta a los pacientes a adquirir sus medicamentos solo en farmacias autorizadas y a no confiar en productos que se comercializan ilegalmente, especialmente aquellos que provienen de fuentes no verificadas, como las redes sociales. Los profesionales de la salud deben ser cautelosos al considerar el uso de compuestos de semaglutida y asegurarse de que los productos provengan de fuentes confiables.
El organismo también advierte sobre los peligros de comprar medicamentos en línea sin la debida supervisión médica, ya que los productos falsificados pueden no solo carecer de eficacia, sino también causar efectos secundarios graves e incluso poner en riesgo la vida de los consumidores.
La FDA continúa monitoreando el mercado para garantizar que los productos farmacéuticos sean seguros y eficaces, y ha reiterado la importancia de consultar con un profesional de la salud antes de iniciar cualquier tratamiento con semaglutida.