Un niño de 7 años murió en la ciudad de Imperatriz, en el estado brasileño de Maranhão, tras consumir un huevo de Pascua que habría estado contaminado. Las autoridades investigan un posible envenenamiento como causa de la muerte, mientras su madre y hermana adolescente permanecen hospitalizadas y una mujer fue detenida como principal sospechosa del crimen.
Un niño de 7 años murió tras ingerir un huevo de Pascua en la ciudad de Imperatriz, ubicada en el estado brasileño de Maranhão. Las autoridades investigan un posible caso de envenenamiento, informó la Policía Civil.
La madre del menor y su hermana adolescente también resultaron afectadas y se encuentran hospitalizadas. De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSP), una mujer de 36 años fue detenida como principal sospechosa del crimen. Se trata de la exnovia de la actual pareja de una de las víctimas, quien fue localizada y capturada por agentes de la Comisaría Regional de Policía de Santa Inês, mientras viajaba en un autobús interurbano en esa misma ciudad, donde reside.
La Comisaría de Imperatriz realizó las primeras diligencias e inició una investigación formal a través del Departamento de Homicidios, que ya se encuentra recolectando testimonios de testigos para esclarecer lo ocurrido.
El cuerpo del menor fue trasladado al Instituto Médico Legal (IML) de Imperatriz, donde se le practicó una necropsia. La Policía Civil permanece a la espera del informe pericial que determine la causa exacta de la muerte.
Asimismo, se solicitó al Instituto Criminalístico de Imperatriz (ICrim) la recolección de muestras biológicas para realizar análisis de laboratorio de las víctimas que aún permanecen internadas.
La investigación continúa en curso. Las autoridades no han descartado ninguna línea de investigación mientras aguardan los resultados forenses.
