Agentes del Departamento Antimafia de la Policía Federal Argentina detuvieron este viernes en Bernal, localidad bonaerense del partido de Quilmes, a un hombre vinculado al tráfico internacional de armas. La detención forma parte de la investigación transnacional «Operación Nevada», originada por la Policía Federal de Bosnia-Herzegovina, que busca desarticular una organización criminal dedicada al tráfico de armamento hacia países como Estados Unidos, Grecia, México y Australia.
El operativo comenzó con la vigilancia del sospechoso, quien había regresado de un viaje a Europa. Los agentes lo siguieron desde el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, de Ezeiza, hasta su domicilio en el sur del conurbano bonaerense. Tras obtener pruebas suficientes, el Juzgado Federal de Primera Instancia de Quilmes, a cargo del Dr. Luis Antonio Armella, autorizó el allanamiento de la vivienda. Fue allí donde se descubrió un arsenal impresionante: 43 fusiles con acuñación del águila nazi, 15 pistolas, 5 bayonetas, una ballesta, una ametralladora 9mm, 3000 fulminantes, 3,5 kilos de pólvora, 3000 puntas, 2500 vainas de distintos calibres y 2 máquinas de carga.
El hallazgo no terminó con las armas. En la misma vivienda, se encontró una gran cantidad de objetos vinculados al régimen nazi, entre ellos un uniforme de la Segunda Guerra Mundial con simbología nazi, bustos de Adolf Hitler y Benito Mussolini, y diversos trofeos de caza, incluidos tres ejemplares disecados de antílopes de la India, en clara infracción a la Ley de Protección Ambiental. Además, se incautaron documentos relacionados con la organización criminal y los materiales confiscados.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, destacó la importancia de la operación al afirmar que se desarticuló una red internacional de tráfico de armas y contrabando de simbología nazi. «Todo esto estaba en la casa de un delincuente detenido en Quilmes. Era la ramificación argentina de una organización criminal internacional. Tras una investigación y seguimiento, los efectivos allanaron su domicilio, lo detuvieron y secuestraron armas y piezas de una época oscura y trágica de la humanidad», declaró Bullrich.
El operativo contó con la colaboración de personal del Museo del Holocausto, que certificó la legalidad de los objetos de simbología nazi incautados, y del Departamento de Delitos Ambientales, que determinó la ilegalidad de las cabezas de antílope. Además, el Departamento de Armas y Explosivos de la Policía Federal, junto a la ANMAC, inspeccionaron las armas secuestradas.
La causa está siendo dirigida por la Unidad Fiscal Especializada en Criminalidad Organizada (UFECO), bajo la supervisión del fiscal Santiago Marquevich. El detenido fue imputado por contrabando y los elementos secuestrados quedaron a disposición de la Justicia.