El oso fue castrado a pesar de las miles de firmas que se reunieron en Change.org para que se respetara su integridad y no se le recluyera en un zoológico. A través de un comunicado, la Profepa informó que investigará el motivo por el que se le practicó ese procedimiento.
El oso negro del parque de Chipinque, ubicado en San Pedro Garza García, Nuevo León, pagó un precio muy alto por interactuar con humanos en días pasados. A pesar de ganarse el corazón de miles de internautas y de la población de Nuevo León y de reunir en la plataforma Change. org miles de firmas para que se respetara su naturaleza y no se le recluyera, el oso sufrió un procedimiento invasivo.
El carismático animal fue avistado en varias ocasiones en las inmediaciones del parque Chipinque durante julio. El oso paseaba por las calles e interactuaba con humanos sin causarles daño. Debido a estos acercamientos, se volvió viral en las redes sociales. Sin embargo, su suerte cambió cuando la Profepa lo capturó la semana pasada y trasladó a la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Nuevo León, de manera posterior sería reubicado en un área verde.
Tras su captura por la personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), los veterinarios a cargo del procedimiento decidieron colocarle un collar de telemetría, realizarle estudios de biometría hemática, química sanguínea, ectoparásitos y endoscopía, entre otros y además, castrarlo. Ahora la Profepa investigará el motivo por el que se le aplicó ese procedimiento al oso.
A través de un comunicado, la dependencia informó que solicitó la remisión de las constancias documentales que sustenten la esterilización del animal. Según la dependencia, Elva Griselda Garza Morado, encargada de la delegación de la Profepa en Nuevo León, dio a conocer que Rogelio Carrera Treviño, Coordinador del Laboratorio de Fauna Silvestre de la Facultad de Veterinaria consideró necesario castrar al oso antes de reubicarlo en la sierra de Nido de Chihuahua debido a su comportamiento errático y por seguridad de la población.
A su vez, Martín Vargas Prieto, director de Inspección y Vigilancia de Vida Silvestre, Recursos Marinos y Ecosistemas Costeros de la Profepa autorizó que se le practicara al oso la orquiectomía bilateral [castración].
Vargas Prieto justificó el procedimiento para evitar el movimiento artificial y reproducción de osos negros, así como para reducir el desplazamiento y la probabilidad de que se enfrente con otros osos de la Sierra, informó la Profepa a través de un comunicado.
Sanjuana Martínez Montemayor, directora de la agencia de noticias del Estado Mexicano, Notimex, informó en un tweet que la Profepa le confirmó el 8 de agosto, que el animal fue castrado por intereses de Miguel B. Treviño, alcalde San Pedro Garza García, cuya esposa Irene Ovalle es dueña del Kinder “La Aldea”, ubicado en el mismo parque nacional donde se avistaba al oso, así como de Jaime Rodríguez Calderón, gobernador de Nuevo León.
La @PROFEPA_Mx me acaba de confirmar que no ordenaron castrar al oso del @ParqueChipinque que esa decisión y la de capturarlo es del alcalde @miguelbtrevino cuya esposa Irene Ovalle tiene el kínder “La Aldea” en el mismo parque nacional Chipinque; y del gobernador @JaimeRdzNL pic.twitter.com/YLpEfj5NhR
— Sanjuana Martínez Montemayor (@SanjuanaNotimex) August 9, 2020
Sin embargo, la Profepa no señaló en su versión oficial como responsables de la decisión ni al gobernador, ni al alcalde de San Pedro, sino a los dos veterinarios. Carrera Treviño también fue señalado por Martínez como el responsable de dar la orden, además de ser adepto a la cacería.
Aquí el doctor Rogelio Carrera, el cazador a cargo de la castración del oso del @ParqueChipinque de donde es consejero. 🤦🏻♀️ pic.twitter.com/tvUH1qBq8d
— Sanjuana Martínez Montemayor (@SanjuanaNotimex) August 10, 2020