La vacuna Sputnik V ya entró en la Fase III. En septiembre iniciará su producción en masa para crear 200 millones de dosis y tenerlas listas para finales de este año. Según la información del Gobierno ruso, México forma parte de los ensayos clínicos de la última fase.
El Ministerio de Salud de la Federación Rusa registró el 11 de agosto del 2020 la primera vacuna desarrollada en el mundo para enfrentar al COVID-19. El fármaco lleva por nombre Sputnik V, en honor a los satélites de la era soviética que lideraron la carrera espacial durante la Guerra Fría.
La Sputnik V fue la primera en llegar al mercado. Su desarrollo fue financiado por el Fondo de Inversión Directa de Rusia (RFPI, por sus siglas en ruso) en colaboración con las farmacéuticas R-Pharm y Binopharm, que forma parte del grupo Alium. La vacuna es desarrollada en el Centro Nacional de Epidemiología y Microbiología Gamelaya, que recibió de manera reciente una patente internacional para la vacuna contra el ébola.
Alexander Gintsburg y Denis Logunov, ambos doctores en biología y miembros de la Academia Rusa de Ciencias, integran el equipo que lleva a cabo el proyecto, junto con el profesor Boris Naroditsky y Sergei Borisevichm miembro del Instituto Central de Investigaciones No. 48 del Ministerio de Defensa Ruso y otros científicos y científicas.
Para contrarrestar la desinformación que ha circulado en torno a la vacuna rusa, ha sido habilitado un sitio web que proporciona información sobre el proyecto. También se lanzó un spot conmemorativo de la vacuna.
Rusia planea implementar la Fase III de ensayos clínicos en varios países, incluidos Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Brasil y Filipinas. Además comenzará la producción en masa en India, Corea del Sur, Brasil y posiblemente Arabia Saudita, Turquía y Cuba. Su producción iniciará en septiembre del 2020, se estima que se podrán fabricar 200 millones de dosis a finales del año, solo 30 millones de ellas serán para Rusia.
CARACTERÍSTICAS DE LA VACUNA RUSA
De acuerdo con el RFPI, los principales tipos de vacunas se diversifican por estar creadas con base en vacunas vectores virales, virus, ácidos nucleicos y proteínas. La vacuna rusa está basada en vectores de adenovirus.
El mecanismo por medio de vectores introduce material genético de otro virus en una célula. El gen del adenovirus, que es el causante de la infección, se extrae y en su lugar se inserta un gen con el código de la proteína de otro virus. Este a su vez, ayuda al sistema inmunológico a producir anticuerpos.
Este sistema permite crear en poco tiempo vacunas seguras que provocan fuertes reacciones inmunológicas. Así es como funciona esta vacuna. Tras la extracción de fragmentos de material genético que codifica la información sobre la estructura de la proteína S -la proteína que forma la «corona» del COVID-19 y es responsable de su enganche a las células humanas- fueron insertados en un vector adenoviral ya conocido para su inserción en una célula humana. Los adenovirus utilizados causan el resfriado común, no son nuevos y existen desde hace miles de años.
Los científicos rusos utilizaron dos tipos diferentes de vectores adenovirales [rAd26 y rAd5] para realizar la inmunización por medio de dos dosis, con lo que reforzarán el efecto.
ENSAYOS CLÍNICOS
Antes de que se realizaran los ensayos clínicos que constituyen las tres fases, los científicos llevaron a cabo pruebas preliminares que incluyeron experimentos con primates. Las fases I y II fueron terminadas el 1 de agosto del 2020.
De acuerdo con los científicos, la vacuna permitió una alta respuesta inmune celular y de anticuerpos. Los científicos informaron que ninguno de los voluntarios ha contraído en Coronavirus. En días pasados el Presidente ruso, Vladimir Putin informó que una de sus hijas participó en estas pruebas.
Las pruebas fueron realizadas con el suero sanguíneo de los voluntarios, que contenían anticuerpos que neutralizan al coronavirus. También se probó la capacidad de las células inmunes de los voluntarios para activarse en respuesta a la proteína «S» de las «espinas» del virus COVID-19, el resultado fue una reacción inmune tanto de anticuerpos como a nivel celular.
La fase III de los ensayos comenzó el 12 de agosto. En estos experimentos participan 2 mil voluntarios de Rusia y países del Medio Oriente, entre ellos Emirates Árabes Unidos y Arabia Saudita. Según la información del RFPI, también se llevan a cabo pruebas en Brasil y México.
La vacuna ya recibió un certificado de registro del Ministerio de Salud de Rusia y de acuerdo con la legislación de ese país, ya puede ser empleada en la población rusa. El principio activo de la vacuna Sputnik V, se encuentra en proceso de obtención de una patente solicitada por el Centro Gamaleya en mayo de 2020.
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