El Tribunal Superior Supremo determinó que el matrimonio debía ser ejecutado por inyección letal.
Un matrimonio de Chongqing fue condenado por el Tribunal Superior Supremo de China a recibir la pena de muerte después de que el padre arrojó desde una ventana de un rascacielos a sus dos hijos, alentado por su novia para iniciar una nueva familia.
El infanticidio ocurrió en 2020, en pleno periodo de pandemia. Este miércoles[31.1.24], tanto el hombre, de nombre Zhang Bo, como su novia, Ye Chengchen, fueron ejecutados por medio de una inyección letal, informó China Daily.
El matrimonio consideró que los niños del matrimonio anterior de Zhang, de uno y dos años de edad, eran un obstáculo para iniciar su nueva vida juntos y orquestaron un plan para fingir una caída accidental.
Un Tribunal Intermedio dictó la sentencia de pena de muerte desde el 28 de diciembre de 2021. Sin embargo, los acusados apelaron el veredicto. El 6 de abril de 2023 inició un nuevo juicio ante el Tribunal Superior Supremo que terminó el 11 de mayo 2023 con la ratificación del fallo en su contra.