Hezbolá había adquirido los buscapersonas como una solución tecnológica de baja gama para intentar evadir el espionaje sofisticado de Israel. Se estima que pudieron ser alterados y cargados con explosivos antes de entrar al Líbano.
Nueve personas fallecieron y 2 mil 750 resultaron heridas durante una serie de explosiones de buscapersonas o localizadores, que fueron detonados en las manos de quienes los portaban en varios lugares del Líbano; principalmente en los suburbios de Dahiyeh, en Beirut y el valle de Bekaa, al sur del país, sitios donde se concentra Hezbolá.
El Ministerio de Salud Pública confirmó que 200 de las víctimas se encuentran en estado crítico. Entre los heridos, se cuenta al embajador de Irán en el Líbano, Mojtaba Amani. Dos miembros de Hezbolá también han sido reconocidos entre las víctimas y una menor de edad.
Uno de los hospitales que recibió heridos fue Monte Líbano en Beirut, a donde llegaron cerca de 40 personas con las manos ensangrentadas y heridas en la cara, en los ojos y con crisis nerviosa.
Se presume que los ataques fueron dirigidos a miembros del grupo libanés Hezbolá, quien responsabilizó a Israel del atentado y advirtió que emprenderán represalias. «El enemigo israelí es plenamente responsable de esta agresión criminal», señaló la organización a través de un comunicado. Ziad Makary, ministro de Información libanés, también responsabilizó a Israel por el atentado.
Desde el 7 de octubre pasado, Israel ha mantenido confrontaciones con Hezbolá. Sin embargo, el gobierno israelí no ha realizado ninguna declaración respecto a las explosiones, pero previamente habían informado de un supuesto atentado frustrado contra un exfuncionario de defensa militar de alto rango. El Gobierno de los Estados Unidos se desmarcó de la agresión, e hizo un llamado a que se resuelvan las diferencias entre Israel y el Líbano de manera diplomática.
Los buscapersonas son un dispositivo inalámbrico que recibe y muestra mensajes de texto, fueron una herramienta de comunicación de Hezbolá a la que recurrieron para evadir la vigilancia y el espionaje de Israel. Un país que cuenta con tecnología sofisticada para realizar espionaje. El experto en seguridad cibernética, Edward Snowden, señaló que el antentado del que estaría detrás Israel no se distingue mucho del terrorismo.
«Lo que Israel acaba de hacer es, por *cualquier* método, imprudente. Hicieron estallar a un sinnúmero de personas que conducían (es decir, coches fuera de control), estaban de compras (sus hijos estaban en el cochecito detrás de ellos, en la cola de la caja), etcétera. No se puede distinguir del terrorismo», afirmó.
Las autoridades del Líbano investigan los medios por los que ingresaron estos dispositivos al país. Johanny Corn, ministro de Telecomunicaciones, comentó a medios de comunicación que los buscapersonas pudieron activarse a distancia. Sin embargo, no tienen certeza aún. Algunas baterías se habrían calentado y sus dueños los arrojaron al suelo antes de que explotaran.
El New York Times publicó una versión que apunta a que los buscapersonas eran de la marca Gold Apollo, fabricados en Taiwán, a los que se les incorporaron explosivos junto a la batería antes de que fueran introducidos al país. Una vez en manos de sus objetivos, pudieron hacerlos explotar a distancia.
Con información de Reuters y New York Times.
