Las intensas lluvias provocadas por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) han golpeado este lunes a las provincias de Barcelona y Tarragona, dejando un saldo de inundaciones, cortes en carreteras y más de 150 vuelos cancelados en el aeropuerto de El Prat. La Generalitat de Cataluña activó alertas en múltiples comarcas ante la amenaza de desbordamientos y lluvias torrenciales que paralizaron el servicio de trenes y afectaron a miles de personas, mientras el temporal continúa su paso por la región.
Las fuertes lluvias provocadas por una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) han dejado este lunes inundaciones y alteraciones en las provincias de Barcelona y Tarragona. Los servicios clave presentan afectaciones y se ha generado un caos en la movilidad. Protección Civil de la Generalitat de Cataluña emitió alertas móviles a los residentes de comarcas como Barcelonès, Baix Llobregat, Vallès Occidental y Vallès Oriental, debido a la intensidad de las precipitaciones que, en algunos puntos, superaron los 150 litros por metro cuadrado.
El temporal ha obligado a suspender el servicio ferroviario de Rodalies durante varias horas, y en el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, 153 vuelos fueron cancelados debido a las condiciones extremas. A través de las redes sociales se han difundido videos donde se observa a los usuarios caminar descalzos en medio de las áreas del aeródromo inundadas.
Las lluvias también causaron desvíos hacia otros aeropuertos como el de Girona-Costa Brava. Las terminales y estacionamientos del aeropuerto sufrieron inundaciones, mientras que en el puerto de Barcelona se registraron hasta 80 milímetros de lluvia en apenas unas horas.
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, calificó el fenómeno como un «escenario sobrevenido», destacando la rapidez e intensidad del temporal. Desde la madrugada, localidades de la región se vieron afectadas por el aumento del caudal de ríos como el Llobregat y el Francolí, que llegaron a niveles de riesgo en municipios como Sant Vicenç dels Horts. Las autoridades mantienen la alerta por la posibilidad de nuevas precipitaciones intensas en la tarde.
Ante la situación, diversas universidades, incluidas la Universidad de Barcelona (UB), la Autónoma de Barcelona (UAB), y la Rovira i Virgili (URV), suspendieron sus actividades. En Girona, la Universidad de Girona (UdG) también detuvo sus actividades desde las 14:00 horas.
El servicio ferroviario de Rodalies sufrió graves interrupciones a lo largo de la jornada. A media mañana, todas las líneas fueron suspendidas, excepto la RL3, que conecta Lleida con Cervera. Tras varias horas, comenzaron a restablecerse parcialmente algunas rutas, entre ellas las líneas R1, R2 Sud, R3 y R4. En cuanto al tráfico aéreo, el ministro de Transportes, Óscar Puente, informó sobre el cierre temporal de la circulación de trenes de alta velocidad en el túnel de El Prat de Llobregat debido al nivel de agua acumulado.
Además de las afectaciones en el transporte, varias carreteras se vieron interrumpidas, como la autovía A-27 en Tarragona, cerrada por desprendimientos, y la C-32 en Gavà, que quedó inundada y bloqueada por vehículos atrapados.
Al finalizar la jornada, el comité de seguimiento de la DANA convocado por el Gobierno catalán insistió en mantener la precaución debido a la inestabilidad meteorológica persistente. La consejera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, señaló que aún existe riesgo en zonas donde los niveles de agua podrían aumentar rápidamente.
Esta DANA es parte de una serie de fenómenos que en los últimos días ha afectado a otras regiones del Mediterráneo español, pero este lunes sus efectos han sido especialmente devastadores en Cataluña, dejando un panorama de caos y desbordamiento de recursos en la región.
