La Guardia Nacional encontró el 1 de noviembre el cuerpo decapitado y mutilado de un menor al interior de una carriola durante un operativo de vigilancia en la colonia Mariano Matamoros Norte, en Tijuana. Junto a los restos, un narcomensaje evidenciaba tensiones entre grupos delictivos, mientras las autoridades investigan si la víctima es un adolescente reportado desaparecido horas antes.
Elementos de la Guardia Nacional que patrullaban la zona descubrieron restoshumanos en huna carriola abandonada en la calle Nicolás Bravo y Sauce, junto a la secundaria número 31 de Tijuana, que correspondían a el cuerpo decapitado y sin manos de un menor de edad. El hallazgo tuvo lugar la madrugada del 1 de noviembre en la colonia Mariano Matamoros Norte.
De acuerdo con Zeta, junto a la víctima fue hallado un narcomensaje clavado en la pierna izquierda con un cuchillo y una mano amputada. Según los primeros informes, el mensaje incluía amenazas dirigidas a un grupo criminal conocido como «la rana», mencionando disputas por control territorial en el fraccionamiento Florido Mariano.
“Esto le va a pasar a todos los que anden con la rana en el florido, ya que tiene dueño y así seguirá, ni seguirán peleando toda la verga, una y mil veces, ya los tenemos bien ubicados a todos. O se alinean o empezará la limpia en sus zonas. Atentamente, la mera vergota”, indicaba el mensaje, de acuerdo con Zeta.
Las autoridades presumen que el cuerpo podría corresponder a Luis Aarón Escobar Sánchez, un menor de 14 años reportado como desaparecido el 31 de octubre. Según testimonios, Luis Aarón fue visto por última vez esa tarde cuando se despidió de su novia en el fraccionamiento Mariano Matamoros, cerca del lugar donde apareció el cadáver.
Familiares del menor identificaron preliminarmente el cuerpo por un lunar, aunque la Fiscalía General de Baja California realiza pruebas genéticas para confirmar la identidad. Cabe destacar que Luis Aarón ya había sido reportado como desaparecido en junio de este mismo año, cuando estuvo ausente por varios días antes de ser localizado.
Este hallazgo ha conmocionado a la comunidad tijuanense, donde la violencia relacionada con el crimen organizado afecta cada vez más a jóvenes.