Una docente de un centro psicopedagógico en Coacalco, Estado de México, fue detenida por su presunta responsabilidad en lesiones a un niño de siete años con discapacidad. La madre del menor denunció los hechos tras encontrarlo con heridas en el rostro, mientras que la Fiscalía amplió la investigación al revelarse videos en redes sociales que muestran presuntos actos de maltrato hacia otros menores.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) informó sobre la puesta a disposición de una mujer identificada como Jaqueline Elizabeth “N”, docente de un Centro Psicopedagógico y de Neurodesarrollo en Coacalco, quien está siendo investigada por su probable responsabilidad en el delito de lesiones contra un alumno de siete años.
El incidente ocurrió el 28 de noviembre, cuando la madre del menor acudió al centro denominado Smart Step, ubicado en la colonia Villa de Las Flores, para recoger a su hijo, quien presenta una discapacidad. Al verlo, notó que tenía lesiones visibles en el pómulo izquierdo y la nariz. De inmediato, solicitó apoyo de elementos de la Comisaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Coacalco, quienes procedieron a detener a Jaqueline Elizabeth “N” en el lugar.
Imágenes fuertes:
La docente fue trasladada al Centro de Justicia para las Mujeres en Ecatepec, donde el Agente del Ministerio Público inició las investigaciones correspondientes. Según la FGJEM, la situación legal de la detenida será determinada en las próximas horas, bajo el principio de presunción de inocencia hasta que se emita una sentencia condenatoria.
En redes sociales, otros padres de familia del instituto compartieron un video en el que se observa a la investigada presuntamente realizando actos de maltrato hacia menores con discapacidad. Esto ha motivado a la Fiscalía a ampliar la investigación para determinar si existen más víctimas de agresiones.
La FGJEM también informó que se han llevado a cabo peritajes en fotografía, criminalística y medicina legal, mientras se implementaron medidas de protección para salvaguardar al menor afectado. El caso continúa en desarrollo y ha generado indignación entre la comunidad local.
