Una violenta riña entre comerciantes informales y policías auxiliares se registró este lunes en la Alameda Central de la Ciudad de México, cuando un operativo para retirar los puestos semifijos de la zona terminó en enfrentamientos físicos. El incidente, que incluyó jaloneos y agresiones, dejó como saldo tres detenidos, quienes fueron trasladados ante el juez cívico.
Una tarde de tensión se vivió en la Alameda Central de la Ciudad de México, donde un operativo para retirar a comerciantes informales terminó en golpes, jaloneos y la detención de tres personas.
Elementos de la Policía Auxiliar de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) acompañaban a personal de Reordenamiento Territorial, quienes buscaban dialogar con los vendedores para liberar espacios en una zona no autorizada. Sin embargo, la negativa de los comerciantes escaló en una confrontación.
Según la SSC, los enfrentamientos derivaron en detenciones: “Debido a la inconformidad de los vendedores de retirar sus puestos semifijos y carritos para la venta de una zona no autorizada, se desató una riña y jaloneos con los policías, personal de la Secretaría de Gobierno; resultado de estos hechos tres personas fueron detenidas y trasladadas ante el Juez Cívico”.
Video: X/@ObturadorMX_
El conflicto no es nuevo. Apenas el 24 de enero, la tensión entre comerciantes y colectivos de mujeres culminó en un conato de bronca en la misma zona. Las integrantes de los colectivos, en defensa de su espacio en la acera de avenida Juárez, bloquearon el paso vehicular con lonas y arrojaron pintura verde pistache a los comerciantes y a trabajadores de la Secretaría de Gobierno.
Los vendedores afectados denunciaron que la pintura dañó su mercancía, como pulseras, ropa, frituras y vasos desechables. “Que paguen lo que nos hicieron perder”, reclamaron.
Aprovechando el desorden, otros comerciantes colocaron sus carritos sobre la banqueta, en protesta por haber sido reubicados en los pasillos de la Alameda, donde, según dijeron, las ventas no son las mismas.
La Alameda Central, que estuvo libre de comercio del 7 al 15 de enero, vuelve a convertirse en un campo de disputa, donde el reordenamiento territorial y la resistencia de los vendedores chocan sin encontrar una solución definitiva.
