En una nueva sacudida a la cúpula de inteligencia de Estados Unidos, el presidente Donald Trump destituyó al director y a la subdirectora de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), Timothy Haugh y Wendy Noble, en medio de una reestructuración que también alcanzó al Consejo de Seguridad Nacional (NSC).
La administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, destituyó al director de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), el general Timothy Haugh, así como a su adjunta, Wendy Noble, en una reestructuración dentro de la comunidad de inteligencia estadounidense. Así lo informó este viernes la cadena CNN, citando a miembros de los comités de inteligencia del Congreso y a dos exfuncionarios con conocimiento directo del tema.
La Agencia de Seguridad Nacional, una poderosa oficina de inteligencia cibernética que opera bajo el Departamento de Defensa, es considerada clave en la estrategia de seguridad del país. Haugh también encabezaba el Comando Cibernético de Estados Unidos, la unidad militar responsable de operaciones ofensivas y defensivas en el ciberespacio.
La salida del general y de su adjunta se produce mientras se espera que el teniente general William Hartman, subdirector del Comando Cibernético y experimentado oficial militar, asuma como jefe interino de la NSA y del comando, según los exfuncionarios citados.
El Gobierno de Trump no ha dado explicaciones oficiales sobre las causas de estas destituciones, que llegan en medio de una ola de cambios en los primeros dos meses del nuevo mandato presidencial.
Las destituciones en la NSA se suman a una serie de despidos registrados el jueves dentro del Consejo de Seguridad Nacional (NSC, por sus siglas en inglés), tras una reunión entre Trump y la activista de extrema derecha Laura Loomer, quien pidió la remoción de varios funcionarios a los que calificó como “desleales”.
En paralelo, el asesor de Seguridad Nacional, Michael Waltz, enfrenta críticas luego de añadir por error al editor en jefe de The Atlantic, Jeffrey Goldberg, a un grupo de chat en la red Signal, donde altos funcionarios discutían ataques militares contra los hutíes en Yemen.
Los movimientos en la NSA y el NSC marcan una nueva fase de reorganización en la cúpula de la seguridad nacional de EU, liderada directamente por el presidente Trump en su segundo periodo en la Casa Blanca.
