La vacuna rusa ha sido recibida con escepticismo y hasta se la ha culpado de crear especulación en el precio del oro.
Para contrarrestar la desinformación que ha circulado en torno a la vacuna rusa Sputnik V contra el COVID-19, el Fondo de Inversión Directa de Rusia (RFPI, por sus siglas en ruso) lanzó un sitio web que proporciona información sobre el proyecto.
También lanzó un spot conmemorativo de la vacuna. En el video se muestra a un gigantesco Coronavirus que se traga el mundo y después un satélite Sputnik que lo alivia.
La animación en 3D conmemora el logro científico de Rusia al obtener el registro de del Ministerio de Salud de Rusia y anunciar su producción en masa para septiembre. Debido a la magnitud del daño que ha causado el COVID-19 y por el que diversos países del mundo buscan una posible cura, este logro es comparado con el éxito de Rusia durante el periodo de la Guerra Fría en que lograron poner en órbita a los famosos satélites Sputnik entre 1957 y 1961.
«En 1957 el exitoso lanzamiento al espacio del primer satélite artificial [el ‘Sputnik-1’] por parte de la Unión Soviética impulsó la investigación espacial en todo el mundo. La nueva vacuna rusa contra el COVID-19 representa un ‘momento Sputnik’ para la comunidad internacional dedicada a la investigación y desarrollo de vacunas. Es por esto que la nueva vacuna contra el COVID-19 ha sido bautizada como Sputnik V» expresan las autoridades rusas en el sitio web.
ESCEPTICISMO CIENTÍFICO
El avance científico de Rusia ha sido recibido con críticas de especialistas y políticos, así como escepticismo por parte de la comunidad científica internacional.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) la vacuna rusa no se encuentra entre las nueve que considera en etapas avanzadas de prueba. Bruce Aylward, asesor principal del director general del organismo, indicó que todavía no cuentan con suficiente información sobre el fármaco.
Esta semana, especialistas en economía atribuyeron la depreciación del precio del ora al anuncio sobre la vacuna rusa contra el COVID-19 que habría motivado la venta masiva de metales.
Alex Azar, secretario de Sanidad y servicios sociales de Estados Unidos señaló que: «La clave no está en ser el primero en tener la vacuna. La clave está en tener una vacuna que sea segura y efectiva para los ciudadanos estadounidenses y para el resto del mundo».
