Durante el periodo de confinamiento por causa de la epidemia del COVID-19 la violencia intrafamliar que afecta en mayor proporción a mujeres se incrementó. Mientras que las cifras del Inegi arrojan un panorama todavía lejano a la equidad en cuanto al aspecto laboral. La mayoría de las mujeres trabajadores aun pertenecen al sector informal y hay pocos avances en la ocupación de cargos públicos, ya que durante el 2020 solo uno de cada tres cargos representativos fueron ocupados por mujeres.
El delito de violencia familiar, que ha estado históricamente relacionado con la violencia contra las mujeres y niñas, se incrementó en un 5.3 por ciento entre el 2019 y el 2020, de acuerdo con los resultados del Censo Nacional de Procuración de Justicia Estatal (CNPJE) 2021.
Según el informe, durante el 2020, la violencia intrafamiliar fue el segundo delito con mayor frecuencia, solo detrás del robo, y fue el único que observó un incremento de más del 5 por ciento. Este aumento en la incidencia fue atribuido al periodo de confinamiento por causa de la epidemia del COVID-19. Al permanecer más tiempo dentro de los hogares, las mujeres estuvieron más expuestas en los casos donde convivieron con miembros de su familia agresores.
Los delitos contra las mujeres se identifican como aquellos que afectan en mayor medida a la población femenina. En el informe se incluyen el de feminicidio, el abuso, acoso y hostigamiento sexual, violación o violación equiparada, estupro, trata de personas y violencia de género en todas sus modalidades. Según el reporte, en 2020 se registraron 273 mil 903 delitos contra la mujer, que integraron carpetas de investigaciones abiertas y averiguaciones previas iniciadas. Estos delitos representaron el 14.8 por ciento del total de denunciados, cifra que corresponde a un millón 856 mil 805.
De los delitos contra la mujer reportados, el 80.4 por ciento corresponde a violencia intrafamiliar, el 8.4 por ciento a abuso sexual, el 6.6 por ciento a violación o violación equiparada, el 2 por ciento a acoso sexual y el .7 por ciento a hostigamiento sexual.
PARTICIPACIÓN EN LA FUNCIÓN PÚBLICA
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), durante el 2020, el rezago de las mujeres en el sector público en México se mantuvo lejos de la equidad, ya que solo un tercio de los funcionarios que ocupan cargos titulares en administración pública a nivel federal fueron mujeres en ese año.
En el caso de las alcaldías, el porcentaje de participación nacional promedio fue del 23.2 por ciento. Tlaxcala, Oaxaca y Morelos fueron las entidades donde se presentó menor equidad, con el 10.2, 22.6 y 28.2 por ciento de manera respectiva. Solo en Baja California esta estadística se elevó al 80 por ciento, y esta fue la única entidad en todo el país donde la ocupación de cargos de alcaldía por mujeres rebasó el 50 por ciento; incluso en la Ciudad de México, el porcentaje se situó en 25 por ciento.
OCUPACIÓN LABORAL
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) la mayoría de las mujeres todavía se dedican al sector informal. En el tercer trimestre del 2021 los datos arrojaron que el 56 por ciento de las mujeres de más de 15 años que obtienen ingresos, los generan en el sector informal, y el 44 por ciento del sector formal, pero en mayor parte de manufactura.
55 de cada 100 mujeres ocuparon actividades de comercio, industria manufacturera y servicios sociales. Los sectores donde las mujeres presentaron menor participación corresponden al de la construcción, al de transportes, comunicaciones, correo y almacenamiento, al de agricultura y ganadería, y al de gobierno y organismos internacionales.