El Departamento de Estado de EU advirtió que continuará imponiendo sanciones a guatemaltecos tras el desconocimiento del triunfo electoral de Bernardo Arévalo y calificó las medidas tomadas por las autoridades como «medidas descaradas» y «acciones antidemocráticas».
El Departamento de Estado de los Estados Unidos anunció que restringió los visados de 300 ciudadanos guatemaltecos, entre ellos, 100 legisladores por «socavar la democracia «, luego de que el Ministerio Público de Guatemala invalidó las elecciones presidenciales en las que resultó vencedor Bernardo Arévalo.
El Gobierno estadounidense informó que tomó la medida represiva con base en la Sección 212(a)(3)(C) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad y advirtió que continuará con las sanciones.
El Departamento de Estado señaló que el Ministerio Público de Guatemala incurrió en acciones contrarias a la Carta Democrática Interamericana al emitir órdenes de arresto a trabajadores electorales y representantes de partidos políticos, solicitar la suspensión de la inmunidad a Bernardo Arévalo, e intentar invalidar las elecciones.
«Estados Unidos condena enérgicamente las actuales acciones antidemocráticas del Ministerio Público de Guatemala y otros actores malignos que socavan el Estado de derecho de Guatemala. Más recientemente, el anuncio por parte del Ministerio Público de órdenes de arresto contra trabajadores electorales y representantes de partidos, su solicitud de retirar la inmunidad del presidente electo Arévalo y sus intentos de anular los resultados electorales constituyen evidencia de su clara intención de deslegitimar las elecciones libres y justas de Guatemala y impedir la transición pacífica del poder. Estas acciones son claramente inconsistentes con la Carta Democrática Interamericana·, señaló el Departamento de Estado.
Asimismo, EU condenó que la suspensión de la inmunidad a magistrados electorales de Guatemala, los ataques a miembros de la oposición, las acciones de intimidación a manifestaciones, las redadas a los almacenes con las actas electorales y la apertura de urnas de votación, hechos que calificó como «medidas descaradas» y «acciones antidemocráticas».
