La violencia volvió a golpear al colectivo Luz de Esperanza Desaparecidos Jalisco. Esta vez, con el asesinato de María del Carmen Morales, madre buscadora, y de su hijo Jaime Daniel Ramírez Morales, en el fraccionamiento Las Villas de Tlajomulco.
La violencia contra quienes buscan a sus seres queridos en Jalisco cobró nuevas víctimas. El colectivo de madres buscadoras Luz de Esperanza Desaparecidos Jalisco denunció el asesinato de su compañera María del Carmen Morales y de su hijo Jaime Daniel Ramírez Morales, ocurrido en el fraccionamiento Las Villas, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga.
Ambos fueron ejecutados este miércoles. La familia llevaba más de un año marcada por la desaparición de Ernesto Julián Ramírez Morales, otro de los hijos de María del Carmen, quien fue visto por última vez el 4 de febrero de 2024 en Las Villas, Jomulco, Jalisco. Desde entonces, su madre emprendió una búsqueda incansable, enfrentándose a la indiferencia institucional y, ahora, a la violencia letal.
A través de un comunicado, el colectivo exigió a la Fiscalía del Estado de Jalisco una investigación inmediata y exhaustiva que permita identificar y castigar a los responsables de este doble homicidio. Además, reclamó justicia para Ernesto, cuya desaparición continúa sin resolverse.
Las madres buscadoras también hicieron un llamado a la presidenta Claudia Sheinbaum para que presione al gobierno estatal y se implementen acciones concretas que frenen la violencia y aseguren justicia para las familias de personas desaparecidas.
Este crimen se suma al asesinato de Teresa González Murillo, también integrante del colectivo, quien falleció el 2 de abril tras resistirse a un intento de secuestro en su domicilio de Guadalajara. Teresa, conocida como “Teresita”, buscaba a su hermano Jaime desde septiembre de 2024. Fue herida de bala en el rostro por sus agresores y murió días después en un hospital.
En el mismo periodo, también fue asesinado Juan Pablo Diego Alonzo Estrada, activista por la paz en Teocaltiche, Jalisco, quien había denunciado amenazas del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y solicitado medidas de protección a la Secretaría de Gobernación. Alonzo Estrada fue acribillado por dos sujetos armados en el patio de su casa el 30 de marzo. Su hermana, Hilaria Alonzo Estrada, resultó herida en el ataque.
Los asesinatos de María del Carmen, Teresita y Juan Pablo, ocurridos en menos de dos semanas, revelan un patrón de agresión sistemática contra quienes luchan por la memoria, la verdad y la justicia en un estado asediado por la criminalidad.