El responsable del hackeo a Twitter es un joven de 17 años que comenzó a estafar en Minecraft

El responsable del hackeo a Twitter es un joven de 17 años que comenzó a estafar en Minecraft

Graham Ivan Clark comenzó su carrera de estafador en Minecraft, tras hackear las cuentas de Twitter de varios magnates será juzgado como adulto por 30 delitos graves.

Graham Ivan Clark, un joven estadounidense de 17 años sería responsable de coordinar el hackeo más grande en la historia de Twitter durante el mes de julio.

De acuerdo con una investigación del New York Times, realizada por Susan Jacobson, Sheelagh McNeil y Jack Begg,  el adolescente convenció a un trabajador de Twitter que pertenecía al departamento de informática de que le prestara una credencial de acceso al portal de servicio al cliente.

De acuerdo los fiscales que llevan el caso de Graham, el joven reunió un equipo de al menos dos personas para lograr burlar la seguridad de Twitter y después poner en venta las cuentas de usuario que robó, pero con la intención de estafar a los compradores interesados. Debido a que él lideraba la operación, la corte lo juzgará como adulto por 30 delitos graves.

A través de las cuentas hacekadas se ofrecía duplicar ganancias a los que participaran en la estafa. Foto: Twitter

EL HACKEO A TWITTER

Clark comenzó a realizar timos desde la plataforma de Minecraft , un videojuego donde estafaba a los jugadores al poner en venta nombres de usuario atractivos y una vez que recibía el pago, desaparecía o bloqueaba a sus clientes. Esta artimaña la repitió varias veces, hasta que se le ocurrió hacer los mismo con nombres de usuario de famosos de Twitter, entre ellos las arrobas de los magnates Elon Musk y Bill Gates, así como la cuenta oficial del expresidente Barack Obama, entre otros.

De acuerdo con documentos y relatos de los cómplices que recolectó el NYT, el joven convocó a usuarios de OGUsers, un foro donde se comercia información robada para realizar el hackeo. Sus cómplices negociarían las arrobas en esta plataforma, mientras Clark entraba en el sistema de la red social y cambiaba el nombre de usuario.

El ingreso al sistema de Twitter se llevó a cabo el 15 de julio. Días más tarde, uno de los cómplices que se hacía llamar «lol» dijo al NYT que el autor intelectual de la operación comenzó a engañar a los clientes que estaban interesados en comprar las cuentas robadas. Una práctica similar a la que Clark realizaba en Minecraft para estafar.

Clark entregó a un comprador una de las cuentas de Twitter que robó, pero la recuperó después al acceder a los sistemas de la plataforma para expulsar al cliente. Clark fue arrestado el 31 de julio en Tampa, Florida.

VIDEOJUEGOS, ESCAPE DE FAMILIA CONFLICTIVA

Graham comenzó a jugar videojuegos para abstraerse de los problemas familiares. De acuerdo con el NYT, de los juevos de video brincó a las estafas con Bitcoin. A los 15 años se unió a un foro de ciberpiratas, un año más tarde se involucró en un robo de 856 mil dólares en criptomonedas, delito por el que nunca fue procesado.

Tras este evento, comenzó a aparecer en las redes sociales con objetos de lujo, entre ellos, un reloj de la marca Rolex con diamantes incrustados.
De acuerdo con fuentes consultadas por el NYT, el joven era hijo de una inmigrante rusa que tenía licencia para realizar tratamientos faciales y ventas de bienes raíces. Sus padres se habían divorciado. Graham era irritable y no le gustaba ir a la escuela. Aunque fue defendido por uno de los usuarios que conocía en Minecraft quien dijo al diario que Clark tenía buen corazón y se preocupaba por los demás.

El joven comenzó a estafar a usuarios de Minecraft con ofertas de nombres de usuario, ya que en este videojuego los usuarios pueden pagar por elementos adicionales. También fingía vender capas para personajes pero tan pronto le pagaban desaparecía sin entregar lo que prometía.

ESTAFAS CON BITCOIN

Graham se sumó después a OGUsers donde se describía a sí mismo como un comerciante de criptomonedas que abandonó los estudios. Sin embargo, los administradores de la plataforma lo expulsaron debido a que no le pagó con Bitcoins a un usuario que ya le había mandado dinero en efectivo para concretar la transacción.

El fraude que realizó por 850 mil dólares en el 2019 tuvo como víctima a Gregg Bennett, un inversionista en tecnología de Seattle. La nota de extorsión que recibió el afectado fue firmada con el seudónimo «Scrim», que utilizaba Clark.

En abril, el Servicio Secreto dio con el adolescente y le confiscó 100 Bitcoins. En ese momento, Clark vivía en su departamento en Tampa, tenía un costoso equipo de videojuegos y conducía un BMW Serie 3 blanco. Dos semanas después de la incautación, el muchacho comenzó a intentar hackear Twitter.