La madrugada del martes, una tragedia sacudió a Santo Domingo, República Dominicana, cuando el techo de la emblemática discoteca Jet Set colapsó durante un concierto del cantante de merengue Rubby Pérez. Al menos 66 personas han muerto y más de 160 resultaron heridas tras el derrumbe, que atrapó a decenas de asistentes bajo los escombros.
La madrugada del martes, el techo de la discoteca Jet Set, ubicada en el Distrito Nacional de la capital dominicana, colapsó durante un concierto del conocido cantante de merengue Rubby Pérez, dejando un saldo trágico de al menos 66 muertos y más de 160 heridos. El lugar, que se encontraba lleno en el momento del incidente, vio cómo decenas de asistentes quedaron atrapados bajo los escombros tras la caída repentina de una parte significativa de la estructura.
El derrumbe ocurrió después de un apagón de electricidad dentro del local, y minutos más tarde, el techo se desplomó mientras Rubby Pérez se encontraba en pleno escenario. Las autoridades del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), junto con equipos de la Defensa Civil, los bomberos y la Policía Nacional, llegaron al lugar para llevar a cabo las labores de rescate. Estas se realizaron con maquinaria pesada y de forma manual, a medida que los equipos buscaban a los sobrevivientes entre los restos del inmueble.
Entre las víctimas fatales se encuentra Nelsy Cruz, gobernadora de Monte Cristi, quien fue trasladada al hospital tras el colapso, pero finalmente falleció. En su llegada a la zona, el presidente Luis Abinader lamentó la magnitud de la tragedia, destacando que la gobernadora Cruz estaba entre los fallecidos.
El merenguero Rubby Pérez, cuya ubicación fue incierta en los primeros momentos tras el derrumbe, fue encontrado posteriormente entre los escombros. Lamentablemente, las autoridades confirmaron su fallecimiento, después de largas horas de espera. Su familia recibió la noticia con gran dolor mientras se encontraban en el lugar.
La discoteca Jet Set, un emblemático lugar de entretenimiento en Santo Domingo, tiene capacidad para 700 personas sentadas y 1,000 de pie. El club ha sido remodelado varias veces, y en 2023 sufrió daños debido a un incendio provocado por un rayo que impactó su planta eléctrica. El empresario Antonio Espaillat, propietario de la discoteca y líder del grupo RCC Media, también se encuentra en el centro de las investigaciones sobre el incidente.
La tragedia se produce en un contexto donde la discoteca, conocida por sus espectáculos en vivo cada lunes, se encuentra en una zona de alta actividad nocturna en la ciudad, rodeada de discotecas, hoteles y restaurantes de lujo. Los esfuerzos de rescate continúan en el lugar, con la esperanza de encontrar más sobrevivientes entre los escombros.
Este desgarrador incidente ha dejado a la nación de luto y a las autoridades trabajando sin descanso para esclarecer las causas de lo sucedido.