La Comisión Federal de Electricidad (CFE) registró una pérdida neta de 16,092 millones de pesos en el primer trimestre de 2025, a pesar de haber reportado ingresos totales por 164,990 millones de pesos, impulsados por el aumento en las ventas de energía y gas natural.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) presentó sus Estados Financieros al primer trimestre de 2025, en los que reportó ingresos totales por 164,990 millones de pesos (mdp), lo que representa un crecimiento de 11.7% respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, a pesar del incremento en ventas, la empresa estatal registró una pérdida neta de 16,092 mdp.
El aumento en los ingresos se atribuyó principalmente a la venta de energía eléctrica, con un alza de 2.1%, destacando el crecimiento en los sectores doméstico (11.3%) y comercial (6.9%). También sobresalió el crecimiento en los ingresos por venta de combustible y transporte de energía, los cuales se duplicaron respecto al mismo periodo del año anterior.
No obstante, los costos de operación aumentaron 32.2% debido a las variaciones en los precios internacionales de los combustibles, particularmente del gas natural, cuyo precio medio se incrementó 60% en el último año. La empresa mitigó parcialmente estos efectos mediante coberturas en el consumo diario del energético.
Pese al entorno adverso, la utilidad operativa de la CFE fue de 14,045 mdp, mientras que el EBITDA alcanzó 36,781 mdp, con un margen de 22.3% respecto a los ingresos totales. El Resultado Neto, después de costos financieros e impuestos de filiales, fue negativo en 16,090 mdp, atribuido a la volatilidad de los combustibles y la cotización del dólar frente al peso.
La deuda documentada de la CFE ascendió a 526,564 mdp, con un incremento de 7.3% respecto al cierre de 2024. En cuanto al Estado de Situación Financiera, los activos totales se ubicaron en 2,655,447 mdp, con un alza de 13.2%, impulsada por mayores niveles de efectivo, reconocimiento de activos intangibles y revaluación de derechos y otros activos.
El pasivo total se mantuvo prácticamente sin cambios respecto al cierre del ejercicio anterior, con un avance marginal de 0.5%, dentro de una política de refinanciamiento de deuda a largo plazo asociada al Plan de Expansión 2025-2030.
A pesar del resultado negativo, la CFE destacó su capacidad operativa y generación de flujo de efectivo como una empresa pública clave para la transformación del sector energético en México, enfocada en atender la demanda creciente de energía eléctrica con un enfoque social y de bienestar.
